Alejandro López Telgie, Jefe de Carrera de Ingeniería Civil Aeroespacial de la Universidad de Concepción, ha contribuido al campo de la ingeniería civil, especialmente en tecnología aeronáutica y espacial. La carrera de Ingeniería Civil Aeroespacial de la UdeC forma profesionales capaces de concebir, diseñar, implementar y operar sistemas tecnológicos aeronáuticos y espaciales, promoviendo un desarrollo sustentable, para resolver problemas complejos. La región del Biobío, con su destacado desarrollo en tecnologías fomenta la innovación y el desarrollo empresarial. En este contexto, la Universidad de Concepción lidera la transición hacia una economía del conocimiento, especialmente en el sector aeroespacial.
“Necesitamos hacer puentes, generar cambios y entrenar a nuestros equipos de profesionales para resolver problemas complejos”, enfatiza, señalando la importancia de retener y desarrollar el talento para generar economías de base científica tecnológica que creen valor.
Alejandro López Telgie
En la región del Biobío, la Universidad de Concepción lidera la transición hacia una economía del conocimiento, enfocándose en fortalecer el sector aeroespacial. Con más de dos décadas de historia, la carrera de Ingeniería Civil Aeroespacial se ha establecido como una de las más solicitadas de la facultad, atrayendo numerosos postulantes por cada vacante. Sin embargo, como destaca Alejandro López Telgie, Jefe de Carrera, un desafío persistente es la retención de talentos en la región, ya que muchos graduados se trasladan en busca de mejores oportunidades. Desde su experiencia en la FIDAE 2024, López subraya la necesidad crítica de desarrollar políticas y estructuras que promuevan el crecimiento del talento local y destaca la importancia de aumentar el financiamiento para proyectos que mejoren la colaboración y refuercen la confianza dentro del ecosistema de innovación regional.
Talento desde el Biobío: Economía del conocimiento
¿Cómo fue la experiencia en la FIDAE?
La experiencia en la FIDAE fue excelente. Tuvimos una presencia sólida y pudimos interactuar con diversos actores relevantes del ecosistema nacional e internacional. Sin embargo, necesitamos más presupuesto para llevar a cabo proyectos conjuntos que permitan construir la confianza necesaria para alianzas efectivas.
-¿En qué consiste el trabajo de la unidad que se encuentra a cargo y cuál ha sido su impacto dentro de la Región?
Ingeniería Civil Aeroespacial es la única carrera de pregrado en Chile con más de 20 años de historia, habiendo comenzado en 2002. Durante los últimos tres años, ha tenido los puntajes de corte más altos de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Concepción, con un gran interés reflejado en aproximadamente 10 postulantes por cada cupo.Mi rol como jefe de carrera incluye tareas administrativas, representación de la carrera y vinculación. A nivel regional, somos un centro de atracción y desarrollo de talento, aunque muchos graduados migran a Santiago para trabajar, mientras una fracción permanece en la región del Biobío.
-¿Cuál es su diagnóstico y proyección de las tecnologías actuales?
En la economía espacial, estamos en una disrupción tecnológica y filosófica. No es solo la tecnología la que ha cambiado dramáticamente en la última década, sino también la aproximación al desarrollo de misiones aeroespaciales, abriendo oportunidades que debemos aprovechar ahora.
-¿Qué necesita Biobío para avanzar hacia una economía del conocimiento?
Biobío necesita atraer, desarrollar y retener talento. Las personas son las que resuelven problemas, y si estos son necesidades globales, el espacio es una forma de servir al mundo desde Biobío. Necesitamos creer a todos los niveles que tenemos a la gente capaz. Nuestros ingenieros UdeC realizan postgrados en las mejores universidades del mundo y trabajan en grandes empresas nacionales e internacionales.Debemos crear espacios físicos y presupuestarios para la experimentación y el desarrollo de nuevas empresas de base científico-tecnológica, lo que permitirá desarrollar y retener nuestro talento. También es esencial crear carreras que proyecten la vida y los desafíos desde Biobío. Necesitamos densidad de conocimiento, laboratorios, espacios de prototipado y conferencias, así como presupuesto para habilitar la cooperación efectiva.
-¿Cómo ven con su equipo la formación de capital humano avanzado en la Región?
Tenemos el talento y estamos atrayendo más. Necesitamos desarrollar abriendo espacios para que las personas puedan dedicarse a lo que hacen mejor, ajustando políticas públicas y procedimientos a las realidades del desarrollo científico-tecnológico.
-¿Cómo podemos competir contra el centralismo y la retención de talento?
Debemos crear proyectos interesantes. El mayor riesgo para un territorio es la emigración de su talento. Necesitamos atraer, desarrollar y retener a los mejores, y para ello necesitamos proyectos con financiamiento que permitan liberar la creatividad y explorar. Debemos ofrecer sueldos competitivos para que los mejores puedan enfocarse en el desarrollo, evitando que se vayan por razones económicas.
-¿Qué le diría a las y los jóvenes que les interesa el área del emprendimiento científico y tecnológico?
Que su momento es ahora y que deben apostar hoy para no arrepentirse mañana.